Pio XII había sido hace no mucho noticia por la beatificación de un hombre que en representación por Cristo no se mostró públicamente en contra de un criminal Holocausto Nazi que arrasó con más de 6 millones de judíos; hoy los judíos vuelven a escribir la historia con sangre, al poco tiempo del genocidio norteamericano en tierras de Iraq, pero no con la suya, en un holocausto que también protagonizan, pero no como las víctimas, sino como los genocidas en las tierras de Gaza.
Los países árabes habrían insistido en la ONU en pedir el cese de los ataques de Israel en la franja de Gaza, iniciada el pasado 27 de diciembre y que ya lleva en su haber 623 palestinos muertos y otros 2600 heridos en una operación llamada Plomo Fundido, su retirada definitiva, el levantamiento del bloqueo Israelí y la instauración de una fuerza internacional para que sea posible el alto el fuego en la zona de conflicto, a la que ningún periodista pudo llegar por la restricción del Gobierno Israelí, que después de una batalla legal, el país invasor se vio obligado a permitir su ingreso, aunque sólo 8, y 2 de los mismos, asignados a dedo por el pueblo escogido de Dios.
Precisamente la no condena de Hamas hizo que el Consejo de Seguridad no aceptara la anterior propuesta de resolución presentada por Libia en nombre de los países árabes en la reunión que celebraron el 31 de diciembre, hallando la negativa de las potencias occidentales, miembros permanentes del Consejo: Estados Unidos, conocido apoyo de Israel, Francia y Reino Unido, por, según ellos, una resolución desequilibrada.
En un encuentro con el presidente israelí, Shimon Peres, la comisaria e Relaciones Exteriores de la Unión Europea, Benita Ferrero-Waldner, Premio Nobel de la paz, exigió un "alto el fuego humanitario" y advirtió que Israel está poniendo en juego su apoyo internacional y su imagen debido a la ofensiva, afirmando que cualquier nación tiene derecho a defenderse de agresiones, refiriéndose a la acusación de Israel contra Gaza de ataques con misiles, pero consideró que las acciones de Israel en la Franja de Gaza son desproporcionadas. Por su parte, Chávez, presidente de Venezuela exigió sean juzgados por un tribunal internacional, los líderes de Israel y Estados unidos de América, Ehud Olmert y George W. Bush, acusándolos de asesinos y cobardes.
El martes 06 de enero, Venezuela habría expulsado al embajador Israelí, Shlomo Cohen, solidarizándose con Palestina, llamando al accionar judío, Terrorismo de Estado.
Los países árabes habrían insistido en la ONU en pedir el cese de los ataques de Israel en la franja de Gaza, iniciada el pasado 27 de diciembre y que ya lleva en su haber 623 palestinos muertos y otros 2600 heridos en una operación llamada Plomo Fundido, su retirada definitiva, el levantamiento del bloqueo Israelí y la instauración de una fuerza internacional para que sea posible el alto el fuego en la zona de conflicto, a la que ningún periodista pudo llegar por la restricción del Gobierno Israelí, que después de una batalla legal, el país invasor se vio obligado a permitir su ingreso, aunque sólo 8, y 2 de los mismos, asignados a dedo por el pueblo escogido de Dios.
"Esta resolución no es para condenar a Hamas sino para encontrar una solución a la situación (...) No es una cuestión sobre Israel y Hamas sino sobre la gente palestina".
Amr Moussa, secretario general de la Liga Árabe
Precisamente la no condena de Hamas hizo que el Consejo de Seguridad no aceptara la anterior propuesta de resolución presentada por Libia en nombre de los países árabes en la reunión que celebraron el 31 de diciembre, hallando la negativa de las potencias occidentales, miembros permanentes del Consejo: Estados Unidos, conocido apoyo de Israel, Francia y Reino Unido, por, según ellos, una resolución desequilibrada.
"No rechazan los judíos el Holocausto? Y qué es lo que actualmente estamos viendo que ocurre en Gaza? Pónganse la mano en el corazón y sean justos (...) Los que acusan, no sólo a mí, a este Gobierno, de ser un Gobierno tiránico, asesino, callan cobardemente (...) El presidente de Israel en este momento debería ser llevado a la Corte Penal Internacional junto con el presidente de Estados Unidos, si hubiera vergüenza en el mundo".
El martes 06 de enero, Venezuela habría expulsado al embajador Israelí, Shlomo Cohen, solidarizándose con Palestina, llamando al accionar judío, Terrorismo de Estado.
"Ante esta hora trágica e indignante Venezuela manifiesta su solidaridad con el heroico pueblo palestino (...) Venezuela presencia una vez más, junto a los pueblos del mundo, el horror de la muerte de niños y mujeres inocentes, producto de la invasión de la franja de Gaza por tropas israelíes, y del bombardeo inclemente que, desde cielo y tierra, descarga sistemáticamente el Estado de Israel sobre territorio palestino (,,,) Venezuela manifiesta su solidaridad irrestricta con el heroico pueblo palestino, comulga en el dolor que embarga a miles de familias por la pérdida de seres queridos, y les tiende la mano al afirmar que el gobierno venezolano no descansará hasta ver severamente castigados a los responsables de estos crímenes atroces (...) Qué cobarde es el ejército de Israel! Atacar a un pueblo rendido, dormido, inocente, y se jactan de estar defendiendo a su pueblo. Yo hago un llamado al pueblo de Israel que se levante contra ese gobierno y que exija que se pongan la mano en el corazón y que vean a sus hijos"
Una Guerra que se inició mucho antes y no parece hallar una paz permanente.
Marco Palacios
publicado antes en Bajo tu Mirada
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